6/10/08

Sobre las regulaciones de edad


Hay un tema que me hace mucha gracia y que me toca muy cerca por ser un ávido fan de la cultura del videojuego, y es el tema de las regulaciones de edad. Estas obviamente no se limitan a los videojuegos, ya que forman parte del amplio espectro de sistemas de regulación que caracterizan a muchas formas artísticas, en especial en el ámbito audiovisual.


La razón que me lleva a escribir esto es la hipocresía de la que hacen gala enormes sectores de la sociedad con respecto a este tema. No es raro ver como determinadas asociaciones de padres y personajes de la vida pública alzan su voz al cielo denunciando a aquellos que crean arte porque resulta "dañino para los menores".

Lo primero de todo: estos sistemas de regulación se crearon específicamente para evitar que ciertos grupos de la sociedad, es decir, los menores, accedieran a ese material que podría resultar contraproducente para su desarrollo.

En sí, el sistema no hace nada. Es esencial que aquellos que están encargados de la educación de los jóvenes (básicamente toda la sociedad adulta) se hagan cargo de que ese sistema se lleve a cabo de la manera más efectiva posible: los distribuidores no vendiendo un producto que por ley NO PUEDEN vender a menores, padres que no cedan ante las exigencias de la criatura para que se calle, padres que están atentos a qué productos acceden sus hijos,... Básicamente sentido común y un poco de adhesión real a aquello que propugnan.

Esto se puede extender a otros campos. No es muy loable que continuamente se esté exhibiendo e incluso haciendo apología de la violencia física y verbal en la televisión a todas horas. Noticias sobre catástrofes, asesinatos y demás "mieles" de la humanidad, programas de "debate" del corazón, películas no recomendadas en horario infantil/juvenil,... Cualquier crío que esté expuesto diariamente a estas proyecciones, fácilmente tomará esas conductas y actitudes como algo normal y como modelos a seguir. Modelos que difícilmente se borrarán con el paso de los años, sobretodo teniendo en cuenta que la televisión ha pasado a ser como un miembro más de la familia.

Por otro lado tenemos Internet y las videoconsolas. Seguiré diciendo que Internet es una herramienta estupenda y un medio de enormísimo potencial para la humanidad en general, y que las consolas son un medio artístico y de entretenimiento sublime, pero los sistemas operativos y las consolas no incluyen un control parental por la risa que da. ¡Hasta la Wii tiene un sistema que permite ver cuántas horas y a qué se ha jugado!

Todas esas herramientas se quedan en el olvido mientras la gente se queja de cómo los medios afectan a sus hijos negativamente, pero no es la primera vez que veo a un padre preguntar por el último Grand Theft Auto para su hijo ni la primera que veo una película "de tiros" a las 6 de la tarde.

Soy un firme defensor de las libertades individuales y aquellos que me conocen bien lo saben, pero creo que ya es hora de que los padres (no todos, que buena gente hay en todas partes) tomen las riendas de la educación de sus hijos, que los medios tomen su parte de responsabilidad en la articulación de la sociedad y se dejen de tanto individualismo egoísta.

2 comentarios:

Manu dijo...

totalmente de acuerdo contigo, estas limitaciones solo irven para prefijar y preservar mediante cliches unas clases de edad ya establecidas. (que pedante me ha quedado)

un saludo tio

Anónimo dijo...

Un aplauso!