Hostil, potente y electrizante. A mi ver, el mejor disco que lanzó esta banda. Estos tejanos malcarados y fiesteros llevaron el Heavy Metal a otro nivel, sirviendo de influencia para muchos de los grupos que vendrían después. Todavía nadie a conseguido sacar un sonido igual.
Fueron unos de los fundadores del subgénero Groove Metal y su sonido sureño sigue resultando demoledor a día de hoy. Puros, directos y sin contemplaciones. Escuchar este disco es como adentrarse en una furiosa tormenta que no deja títere con cabeza. Cuando lo termines, no sabrás qué te ha golpeado, pero seguro que quieres repetir la experiencia.
Una lástima que ya no se les pueda ver en directo.
Para Dimebag Darrell: fuiste uno de los grandes.
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